Noboa, del partido Renovador Institución (Prian), con el 26,63 por ciento de los votos, y Correa, con el 22,90 del sufragio, aseguraron su pase a una segunda vuelta electoral el 26 de noviembre próximo.
Al contabilizarse el 94,46 por ciento de escrutinio, los dos pretendientes, de tendencias políticas muy diferentes, dejaron atrás a sus contrincantes y alistan sus estrategias en busca de captar los votos de otras agrupaciones.
Los expertos políticos reconocen que esta será una campaña muy conflictiva, en la cual la derecha cerrará fila junto al magnate y denominado también aquí zar del banano.
Con el respaldo de la maquinaria mediática, de los poderes fácticos y de su fortuna personal, ascendente a más de 900 millones de dólares, Noboa tendrá un escenario mucho mejor que su joven adversario, quien está representado por un movimiento nuevo.
Para el aspirante de Alianza País, quien venció a los candidatos de los viejos partidos políticos, su contrincante heredó más chequera que neuronas.
Adelantó que mantendrá sus propuestas de cambio para privilegiar al más del 60 por ciento de la población pobre y enfocará ahora su discurso en precisar sus planes de reforma.
El economista descartó una alianza con las formaciones añejas, pero aceptó el respaldo de las bases de estas agrupaciones.
Hasta el momento, la dirigencia de Izquierda Democrática (ID), que se unió en la primera vuelta del 15 de octubre pasado al candidato León Roldós, anunció su apoyo ahora a Correa.
El líder de la ID, Guillermo Landázuri, afirmo que su partido nunca se uniría a Noboa, quien heredó una fortuna en medio de una disputa familiar y ha llenado sus bolsillos con la explotación de empleados del banano y la contratación de menores.
Se espera asimismo el apoyo del movimiento Pachakutik, brazo político de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del país, debido a la coincidencia en las propuestas contra el Tratado de Libre Comercio y la Asamblea Constituyente, entre otros puntos.
Voceros de su movimiento señalaron que Correa dialoga con importantes organizaciones sociales y se apresta a hacerlo con sindicatos y gremios empresariales en busca de atraer votos.
Para la próxima semana se espera el anuncio de su plan para esta segunda vuelta, indicaron las fuentes.
Por su parte, Noboa descartó hacer alianza con las dirigencias de partidos tradicionales, pues recordó que ganó solo en la primera vuelta y lo hará igual en una segunda ronda.
Sin embargo, anunció su simpatía por la familia Gutiérrez, de Sociedad Patriótica, que se ha convertido en una importante fuerza política en este país, debido al apoyo logrado en provincias.
Pienso que el pueblo que voto por Gilmar y el ex presidente Lucio Gutiérrez lo hará por Noboa en noviembre, enfatizó.
Los electores están ya convocados a votar en noviembre por «la estabilidad de lo mismo» que el Ecuador tiene ahora o por la reforma política que necesita el país para salir de su declive socio-económico.
Quito, 20 octubre 2006
Prensa Latina , 0, 51, 3