Investigadores de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) avistaron desde hace dos años con ayuda de un telescopio, sensible a dos bandas de longitud de ondas diferentes, como la estrella era mutilada por el agujero.
Ese episodio se observó por el telescopio orbital Galaxy Evolution Explorer en la constelación Bootes, en una galaxia ubicada a cuatro mil años luz de la Tierra.
De acuerdo con los investigadores, la estrella se aproximó mucho al agujero negro y fue atraída por su fuerza gravitatoria, que es tan poderosa que ni siquiera la luz puede escapar de ella.
Los agujeros negros son cuerpos masivos y se piensa que la mayor parte de ellos se encuentran en el centro de las galaxias.
La teoría indica que los objetos llamados agujeros negros se formarían cuando una cantidad apreciable de materia cósmica se acumula en un volumen extremadamente reducido del espacio; por ejemplo, luego del colapso de una estrella.
Washington, 6 diciembre 2006
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