Según pudo constatar Crónica Digital, entre los detenidos se pudo ver a Viviana Díaz y Mireya García dirigentas de la AFDD que intentaron pasar por la calle Morande y dejar una flores en la puerta donde ingresaba el presidente Salvador Allende y que lleva el número 80 de esa calle.
Desde las primeras horas de hoy se pudo ver en las calles del centro de la capital, un formidable despliegue policial que impidió que unos 10 mil chilenos rindieran homenaje al Presidente Salvador Allende frente al Palacio de La Moneda, a 34 años de su muerte tras el golpe militar de Augusto Pinochet.
Los manifestantes, no obstante, optaron por desfilar sin incidentes rumbo al Cementerio General para realizar allí un acto conmemorativo de la fecha, descrita como «el primer 11 de septiembre sin Pinochet».
Los dirigentes de la marcha, de varias organizaciones políticas y de derechos humanos, intentaron desfilar temprano por la emblemática Alameda Bernardo O Higgins hacia La Moneda, donde se levanta un monumento a Allende, pero fueron interceptados por Carabineros.
Los manifestantes se habían concentrado en el barrio Los Héroes, a tres cuadras de la sede de Gobierno, pero miles de efectivos policiales, a pie y a caballo, tomaron posiciones en torno a ellos con barreras metálicas y carros lanzaguas y lanza gases.
Mireya García dijo a la prensa que «una provocación. Es no respetar lo que estamos conmemorando, es no respetar la memoria de las víctimas, es un retroceso inmenso para la democracia».
«A nosotros nos duele que estemos viviendo esta situación en el Gobierno de la Presidenta Bachelet especialmente. Es una incongruencia, un sin sentido. No puede ser que una Presidenta que también fue víctima de la dictadura no entienda el enorme simbolismo que tiene pasar por Morandé 80 a rendir homenaje, solamente con nuestros pasos por donde salió muerto el Presidente (Salvador) Allende», arengó Viviana Díaz, para luego ser detenida junto a García.
El Gobierno había prohibido que la marcha se acercara a La Moneda, lo que provocó el rechazo de los organizadores, quienes anunciaron su intención de intentarlo de todas maneras por considerarlo su derecho.
La manifestación fue encabezada por miembros de la Asamblea de Derechos Humanos y familiares de detenidos-desparecidos, que portaban fotos de sus seres queridos y demandaban justicia, así como por dirigentes del Partido Comunista y otras organizaciones populares.
La marcha sigue una masiva movilización de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) hace 10 días, que derivó en varios incidentes de violencia, tanto en Santiago como en otras ciudades del país.
En tanto, el abogado de derechos humanos Hugo Gutiérrez, dijo a Radio Nuevo Mundo que presentaran querellas contra el gobierno y las fuerzas policiales por la forma que se reprimió este mediodía a los miles de manifestantes en los alrededores de La Moneda y en el propio Cementerio General.
Santiago de Chile, 9 de septiembre 2007
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