Debido a la importancia del tema y a la no existencia de estudios específicos sobre éste.
Esto representa un paso importante en el respeto y protección de los derechos de los niños visualizando las formas de violencia y los espacios en que ella se da, además de hacer patente la tolerancia que de muchas de ellas se tiene culturalmente (por ejemplo formas de corrección o disciplina), y no nos damos cuenta de sus consecuencias y continuación en las vidas de los niños y niñas y adolescentes.
Entre las características de esta violencia contra los menores es que se da en todas las sociedades y en todos los grupos sociales, permaneciendo la mayoría de las veces oculta. Se indica en el informe que más de 80.000 niños mueren a causa de violencia doméstica. La gravedad de esta situación en la familia, es corroborada en los últimos estudios realizados por la Unicef en Chile, los que señalan que en el 2006 el 50 % de los niños son víctimas de maltrato físico en estos espacios.
Así los ámbitos donde se da esta violencia son, como se indicaba principalmente en la familia, en la escuela, en la comunidad, en los entornos de trabajo y en las instituciones. Aunque parece que en la prensa se representa más bien la violencia desde los jóvenes, en relación a la participación de ellos en delitos violentos, responsabilizándolos de parte de la inseguridad de la comunidad; que la que se ejerce contra ellos, de esta forma situaciones como explotación sexual de niños y niñas, la violencia física y psicológica que contra ellos se ejerce por parte de carabineros en comunidades mapuche como Temucucicui o agresiones en establecimientos escolares, abusos sexuales o exclusión.
Puntos claros para hacer frente a estas situaciones son los indicados en el informe en torno a la prevención, participación de los niños, niñas y jóvenes, políticas públicas contra la desigualdad y como siempre en todos los temas referentes a derechos humanos, la necesidad de ratificar y adecuar en nuestra legislación nacional a los instrumentos internacionales vigentes.
Por: Patricia Albornoz, directora Departamento de Derechos Humanos de la Universidad Central.
Santiago de Chile, 21 de marzo 2007
Crónica Digital , 0, 27, 20