De acuerdo con el estudio, divulgado en la más reciente edición de la revista Occupational Medicine, las molestias musculo-esqueléticas son debidas en la mayor parte de los casos, a las condiciones de trabajo.
El estudio reveló que el 74 por ciento de los encuestados padecían alteraciones cervicales y a nivel de la articulación escapulo-humeral, 72 por ciento referían dolores en los brazos y 50 por ciento en la parte baja de la espalda.
Sin embargo, los autores de la investigación consideran que esas cifras podrían ser algo más elevadas entre la población en general, dado que los participantes eran jóvenes con buen estado de salud.
Por otra parte, los especialistas observaron que las mujeres son más propensas a sufrir dolor en cuello u hombros, en los brazos y malestares lumbares, un mal casi siempre causado por posturas inadecuadas mantenidas durante mucho tiempo y un estado muscular deficiente.
Una serie de ensayos realizados sugieren que padecer estas molestias en la juventud aumenta significativamente el riesgo de sufrirlas de forma crónica en la edad adulta.
Oslo, 3 de junio 2006
Crónica Digital , 0, 55, 10