El Centro de Control Aeroespacial de Beijing (CCAB) envió las órdenes electrónicas necesarias para que la estación pusiera en marcha los motores de frenado, poco después de las 11 de la mañana, con lo cual quedó atrapada por la gravedad lunar a las 11:37 AM.
Todavía la Change-1, lanzada al espacio el pasado 24 de octubre desde la base de Xichang, en la provincia de Sichuán, tendrá que realizar dos correcciones orbitales en los próximos días para colocarse a unos 200 kilómetros de altura sobre el suelo lunar.
La sonda es la primera de tres naves que China dedicará en los próximos años a investigar el astro, programa científico que culminará con el regreso a nuestro planeta de la Change-3, cargada con muestras de rocas.
El ingenio lleva a bordo cámaras de alta resolución para fotografiar la superficie, sensores remotos de rayos X y gamma, y otros equipos especializados para recopilar todos los datos posibles sobre la Luna y el espacio circundante.
Este programa lunar forma parte del conjunto del plan de desarrollo especial de China, que también incluye más vuelos tripulados, la construcción de una nueva familia de cohetes portadores y satélites especializados.
Esos cohetes podrán transportar hasta 25 toneladas a una órbita baja y 12 toneladas a una órbita geosincrónica.
La nación asiática ya ha puesto de órbita satélites meteorológicos, desarrolla un programa de satélites Brújula para el posicionamiento terrestre, así como otros de telecomunicaciones, alerta de catástrofes y evaluación de recursos
Beijing, 5 noviembre 2007
Prensa Latina , 0, 38, 10