El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) saludó hoy el resultado del plebiscito realizado en Chile para superar la Constitución impuesta por la dictadura de Augusto Pinochet.
En un breve comunicado, la formación salvadoreña de izquierda valoró la mayoritaria validación de una nueva carta magna «encargada de superar por fin el marco legal impuesto por la nefasta dictadura de Pinochet».
«La Patria Grande saluda este triunfo de la dignidad de los pueblos», agrega la nota del FMLN, a propósito del resultado de la consulta resultante del estallido social de octubre de 2019, reprimido por las fuerzas del orden público.
Varios parlamentarios de la organización también destacaron desde sus redes sociales los resultados emitidos por el Servicio Electoral de Chile, según el cual un 78,27 por ciento de los 7,5 millones de votantes favoreció una nueva Constitución en 2021.
Ese resultado llegó tras meses de protestas en las calles contra el Gobierno de Sebastián Piñera, pese a la fuerte represión policial denunciada por organizaciones de derechos humanos y la prensa internacional.
Managua, 26 de octubre 2020
Crónica Digital/PL
Mar Oct 27 , 2020
Por Marcel Garcés Muñoz Los resultados del Plebiscito del domingo 25 consolidan un proceso político y social histórico, acorralando a los enemigos de la democracia y los derechos sociales de los chilenos, abriendo una ruta de avances y de cambio, para la sociedad, para la política, la economía y el futuro del país. Los ciudadanos han dado un veredicto contundente¨: un 78.3 por ciento de los ciudadanos participantes en la consulta. Se pronunciaron, por el “Apruebo” una nueva Constitución, y un 79 por ciento, por la instalación de una Convención Constituyente, para elaborarla, la que tendrá el carácter paritario- igual número de hombres y de mujeres-, elegida en la totalidad de sus integrantes por el voto ciudadano, La opción “rechazo” solo alcanzo un 21.7 por ciento de los votos y la propuesta de una Convención Mixta- 50 por ciento de actuales parlamentarios y la otra mitad de representantes elegidos- solo llegó a un 21 por ciento. Un somero análisis de otras estadísticas del plebiscito establece, según el escrutinio hasta las 0.15 horas del lunes 26, con el 99.47 de los sufragios, que se registraron 7.529.459 votos válidamente emitidos, de un padrón de 14.855.719, es decir un 50.6 por ciento, “la votación absoluta mayor de la historia”, según el presidente del SERVEL, Patricio Santamaría La cantidad de votantes superó a la de la segunda vuelta presidencial de 2017, cuando se registraron 6.956.481 votos válidos, con un 49 por ciento de participación, y donde el actual presidente Sebastián Piñera, fue elegido con 3.790.577 votos, un 54.58 por ciento Son cifras que hacen pensar además a la vista de la baja de la votación de su sector político, además de la baja ostensible de su aprobación y del rechazo ciudadano que apuntan las encuestas, el Mandatario no podría seguir utilizando desde el punto de vista político propagandístico, el argumento de su elección en 2017, en circunstancia que hoy la ciudadanía de manera tan rotunda, rechaza a su gobierno, a su bloque gobernante, y a su propia figura. (eso que llaman, “legitimidad de ejercicio”). Además, dicho sea de paso, que un sector ultra, violentista, y terrorista de la derecha, que obedece a la orientación de la UDI, de José Antonio Kast, y De la Carrera, lo descalifica y le enrostra la responsabilidad de la derrota de este domingo 25, y que llaman, descaradamente al Golpe de Estado. Esa es la escueta y abrumadora realidad, que ningún lastimero y demagógico discurso presidencial puede disfrazar o intentar asumirlo como propio, en medio de una fantasmal puesta en escena de descorazonados y patéticos rostros de ministros y otros funcionarios, en la puerta de La Moneda. Entre otras cosas, además de la derrota de sus maniobras, son cifras que hacen pensar que el Mandatario no podría seguir utilizando amenazas, chantajes, provocaciones, montajes o acusaciones de violencia terrorista, por que el mensaje real, profundo de los ciudadanos es el “rechazo” al modelo económico neoliberal, a una política basada en eslóganes sacados del sombrero, y que se basa en descalificaciones y caricaturas de la oposición, a la que incluso se les criminaliza como antipatriotas, como […]