En una carta pública, Lartiga dice que en mi calidad de militante comunista,quiero precisar algunas cosas en relación a la propuesta que el Partido Comunista ha hecho al pueblo de Chile y a la candidata presidencial de la Concertación, puesto que en muchas opiniones entregadas a través de su medio esta propuesta ha sido desvirtuada.
Según la misiva, la propuesta de los comunistas que han entregado a Bachelet no significa ni pacto, ni alianza, ni nada que se le parezca entre el PC y la Concertación, sencillamente porque el proyecto de la Concertación es neoliberal y la alternativa que nosotros construimos es anti neoliberal. La Concertación está comprometida con un proyecto profundamente antidemocrático toda vez que se basa en una Constitución impuesta a nuestra sociedad a sangre y fuego por la dictadura de Pinochet. Nosotros luchamos por construir una sociedad nueva verdaderamente democrática y participativa, profundamente humana y con justicia social.
Para la amiga de la extinta líder de la izquierda chilena, Gladys Marín, la propuesta del PC rechaza la prepotencia de los dirigentes de la Concertación que disponen de los votos del Juntos Podemos Más como si fueran propios. Los votos del Juntos Podemos Más son votos para un proyecto de cambio, son votos que ya no quieren más neoliberalismo, son votos que aspiran a una democracia verdadera y a la justicia social para todos los chilenos y chilenas. Por lo tanto, si la Concertación desea los votos de la Izquierda, debe al menos comprometerse a realizar ¡ya! las 5 demandas planteadas en nuestra propuesta. Y no basta un «sí, me comprometo», sino que es necesario además el cuándo y el cómo dicho abiertamente, de cara al país. Sin este compromiso, los comunistas, los aliados del Juntos Podemos Más y todos los electores que nos apoyaron y todos los que se sientan interpretados por nosotros, tienen la autoridad moral y política para anular su voto, precisa.
Finalmente, Lartiga señala que la demanda de cinco puntos del PC, es el mínimo de lo mínimo para hacer justicia a miles de chilenos y chilenas que ya no resisten más la situación de abandono, miseria y exclusión en la que se encuentran. Cumplir estas demandas significa atender en parte algunas de las necesidades más urgentes de nuestro pueblo. Significa crear mejores condiciones para la lucha que se viene porque aunque la mona se vista de seda, el gobierno que viene será tan neoliberal como el actual y nosotros continuaremos dándole pelea en las calles de la patria.
Santiago de Chile, 19 de diciembre 2005
Crónica Digital
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