Además de propuestas a corto plazo, traemos un proyecto con futuro y en la medida que lo reafirmemos las cosas van a modificarse radicalmente, afirmó Moreno al comentar las escasas intenciones de voto que de momento recibe el frente.
El también secretario general del Partido Comunista del Perú-Patria Roja, admitió que en los últimos años la izquierda peruana pasó por un mal momento, a causa de conocidas coyunturas internacionales, así como a afanes imitativos, dogmatismos y divisiones internas.
Significó que los partidos y la prensa de derecha también se las arreglaron para infundir a la población miedo hacia la izquierda mediante una campaña que la vinculó al Sendero Luminoso y el terrorismo.
Pero el tiempo ha colocado las cosas en su lugar y en los meses que vienen la izquierda va a reafirmarse como una fuerza política fundamental en el Perú, auguró.
Tengo la seguridad, y los hechos lo están evidenciando, que las posibilidades de captación de simpatía del electorado son bastante significativas, remarcó.
Hemos hecho serios esfuerzos por la unidad -aseveró- pero lamentablemente no todas las organizaciones han respondido a nuestro llamado.
Negó que el también candidato a la presidencia Ollanta Humala represente una nueva izquierda. Siempre ha dicho (Humala) que para él no existe esa palabra, él habla de nacionalismo, precisó.
Moreno indicó que el Partido Nacionalista Peruano (PNP) fue una de las fuerzas a las que convocó a «un proyecto más vasto», y explicó que «todo se frustró cuando Humala advirtió que subía en las encuestas».
Asimismo señaló que el líder del PNP «tiene una visión estrictamente caudillista, muy personalista».
Por su parte, Juan José Gorriti, candidato a la primera vicepresidencia por el Frente Amplio, apuntó que la propuesta de esa fuerza, difiere de otras en que plantea el desarrollo económico del país, «pero un desarrollo sostenible y con equidad».
El también líder de la Confederación General de Trabajadores del Perú indicó que el modelo planteado por el actual gobierno ha generado crecimiento económico, pero sin que la población lo perciba en su vida diaria a través del llamado «chorreo».
Nuestra propuesta, en cambio, también propende al desarrollo económico, pero pasa por el aumento de las fuentes de empleo y el respeto a los derechos laborales y ciudadanos en general, argumentó.
Afirmó que el Frente no rechaza la inversión privada, «pero con regulaciones, porque las empresas deben pagar impuestos, según ganen, para que a través de eso el Estado pueda invertir y reinvertir».
El Estado -apuntó- tiene que desempeñar un papel protagónico en el desarrollo de la economía nacional y no ser un simple espectador, porque el de ahora no es siquiera es un regulador.
Lima, 30 de diciembre 2005
Prensa Latina , 0, 128, 11
