El sentido de este artículo es focalizar en un aspecto: el papel que pueden jugar las izquierdas chilenas, y los sectores progresistas, en este escenario.
Está, por un lado, lo referido al cambio del sistema previsional. Por otro, la creciente demanda de cambio al sistema binominal.
En ambos ámbitos, con grados más o grados menos, las diversas expresiones de las izquierdas chilenas han jugado un protagonismo que las legitima ante la ciudadanía y las convierte en punto de referencia para la batalla que comienza.
Sin embargo, es necesario reconocer, que hay expresiones de las izquierdas que le dan importancia política y táctica de primer orden, a estas cuestiones, y otras referencias de izquierdas que no consideran como cuestiones prioritarias estos asuntos, o las ven como parte de procesos y escenarios ubicados en el marco de estrategias globales.
Las fuerzas de izquierda que han puesto prioridad política y táctica a estos asuntos (también a otros), en general son las mismas que llamaron a votar por Michelle Bachelet en segunda vuelta, y que ubican los cinco puntos en dos líneas simultáneas:
1) Como demandas democratizadoras en los terrenos político y social, que involucran las aspiraciones de mayorías nacionales.
2) Como expresión sustantiva en la construcción de una alternativa antineoliberal, que se intenta conectar, política y socialmente, con las esperanzas de grandes masas ciudadanas.
Como se ha señalado, en forma reiterada, esta posición no ubica tal proceso, pasiva y estáticamente, en lo que pueda hacer o no hacer el gobierno de Bachelet. Aunque, por cierto, no le puede ser indiferente.
Se trata de una gran e intensa batalla, que se requiere dar, activamente. En este contexto, todo indica que la acumulación de fuerzas sociales y políticas (por un cambio en justicia social del sistema previsional, y por un sistema proporcional que garantice el pluralismo) serán un factor muy relevante respecto de la dirección que adquiera el proceso en disputa, y finalmente las propuestas que se resuelvan.
Muy oportunamente, se han comenzado a producir unas convergencias en torno a ambos asuntos, ambas estimuladas por una centralidad que surge, inicialmente, de las convocatorias formuladas por la Central Unitaria de Trabajadores, CUT.
Se trata de convergencias sociales y políticas, plurales, en donde se han considerado convocados desde gremios, partidos, parlamentarios, sindicatos, especialistas, hasta corrientes de opinión y rectores de universidades públicas y privadas.
En la continuidad de este proceso de construcción, las izquierdas que han formulado una apuesta política propositiva y diversa, de construcción de fuerza en movimiento y siempre tratando de vincularse a las mayorías nacionales, a los excluídos en todos los aspectos, tienen un papel relevante que jugar en el movimiento de estas convergencias.
La batalla no será fácil, ninguna batalla es y ha sido fácil para los excluídos. Hay que empujar y hacer nacional las propuestas de cambio al sistema previsional y al sistema binominal, que surgan desde este espacio político-social la que ha convocado la CUT.
¡Hay grandes poderes políticos y económicos que enfrentar!.
Esta convergencia tiene un gran punto a favor en un sentido clave: Entre las propuestas de la CUT, la plataforma de gobierno del Juntos Podemos Más (sobre estos específicos puntos), la plataforma de las fuerzas de izquierda y progresistas que firmaron el documento del Cerro Huelén, e incluso sectores relevantes de la Concertación, hay concordancias no menores, hay coincidencias sustantivas.
Pero a la propuesta se require darle movimiento, acción, propaganda, sentido de masas y de ciudadanía. Se requiere replicar en todo el país, especialmente en las comunas y frentes sociales.
Hoy es el tiempo del trabajo político y de masas. Más adelante se podrá evaluar un proceso que, a todas luces, muestra grandes potencialidades para avanzar, y construir alternativa antineoliberal, con y desde las demandas populares.
Por: Juan Andrés Lagos. El autor es periodista y ecadémico de las universidades ARCIS y de Santiago. Subdirector de Crónica Digital. Miembro de la Comisión Política del Partido Comunista de Chile.
Santiago de Chile, 23 de marzo 2006
Crónica Digital
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