La denuncia está basada en un informe especial elaborado por la Contraloría General a solicitud del senador José García, de la derechista Renovación Nacional (RN), quien sospecha que parte de los fondos fueron desviados para la campaña electoral del pasado año.
El tema de la corrupción y la probidad fue reiteradamente esgrimido por la oposición desde que se descubrió el pago de sobresueldos en el Ministerio de Obras Públicas -en lo que luego se denominó el MOPgate- cuando el ex presidente Ricardo Lagos era ministro del ramo.
El pasado año el asunto resurgió con fuerza al ponerse de manifiesto que varios ministros, altos funcionarios y parientes cercanos al ex gobernante tenían jugosos contratos de servicio paralelos, de dudosa legalidad, con dependencias públicas.
Los datos, dados a conocer por el propio García, revelaron -entre otras cosas- que el gasto fiscal por concepto de honorarios se elevó por sobre los 73 mil millones de pesos (unos 142 millones de dólares) durante el pasado año, respecto al 2004.
El informe muestra asimismo que algunos ministerios y subsecretarías duplicaron, y en algunos casos hasta quintuplicaron, los dineros establecidos en la Ley de Presupuestos 2005 para rubros como el pago de viáticos y horas extras.
Según el senador, la sola lectura de los antecedentes da para, a lo menos, levantar sospechas sobre la posibilidad de que los recursos hayan sido destinados a fines electorales, sobre todo teniendo en cuenta la «grosera intervención» de Lagos en la campaña.
El parlamentario llamó la atención sobre el nivel de los gastos en que se incurrieron, y dijo que sólo la cifra destinada a pagar los honorarios basta para superar inversiones como la requerida para el último reajuste a las pensiones mínimas y asistenciales.
«Se invierten migajas para los pensionados, mientras millones en honorarios para los amigos del gobierno. Eso es inaceptable», enfatizó tras revelar que ha oficiado a la Contraloría para que investigue la efectividad de los denominados contratos honorarios y demás gastos.
En lo referente al gasto por concepto de honorarios, las cifras que más llaman la atención son las que el informe consigna, entre otros, para reparticiones como el Ministerio de Agricultura, que el pasado año aumentó sus costos por más de 900 por ciento.
Respecto a los viáticos, una de las reparticiones que más vieron aumentar sus cifras en relación a lo previsto en la Ley de Presupuestos fue el Ministerio de Justicia, que superó en cerca de 50 por ciento lo establecido por la normativa.
En tanto, respecto al pago de horas extras, hubo dependencias que, como en el caso del Ministerio del Interior, duplicaron los recursos pre establecidos en el presupuesto.
En la Contraloría no hubo pronunciamiento oficial sobre estos antecedentes, mientras el gobierno de Michelle Bachelet salió en defensa de Lagos, aún cuando la actual administración es ajena a los hechos denunciados.
El vocero de Gobierno, Ricardo Lagos Weber (hijo del ex mandatario), afirmó que el gasto en honorarios representa menos del tres por ciento del total de las remuneraciones que paga el sector público y atribuyó las cifras «a traspasos contables».
Santiago de Chile, 20 de mayo 2006
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