Un comunicado de la Municipalidad indicó que la medida se adopta a consecuencia de que la conducta de los alumnos representa «claro obstáculo o entorpecimiento al otorgamiento del servicio educacional que la Corporación de Desarrollo Social de Providencia tiene la obligación de proporcionar a la comunidad estudiantil».
Añade que existiría «una actitud de rebeldía y contumaz oposición a lo resuelto por la Municipalidad de Providencia de regularizar el proceso educacional comunal ante una toma anterior realizada el 13 de octubre de 2006 y por lo cual se había solicitado a Carabineros su desalojo, materializado en la madrugada del 15».
También señaló que los alumnos han cometido «una falta de respeto al personal directivo, docente, paradocente y de mantención, al impedirles ingresar a su lugar de trabajo».
La Municipalidad recordó que «conforme al Reglamento de Disciplina del Liceo Lastarria, el alumno tiene el deber de estudiar, de asistir a clases con puntualidad y participar en su formación y en las actividades propias del plan de estudio; respetar a sus pares, a los docentes, al personal de administración y de servicios; seguir las orientaciones de los profesores y profesoras y mostrarles respeto y consideración y respetar el derecho a estudiar de sus compañeros».
Enfatizó: «De acuerdo al referido Reglamento, sobre Normas Conductuales Específicas, constituye falta grave, faltar el respeto, de hecho o de palabra, a los funcionarios del Liceo (Docente Directivo; Docente; Paradocente y/o Mantención)».
Para el municipio «la conducta descrita constituye una transgresión grave a las normas y deberes antes indicados, desde que la comunidad escolar no ha podido desarrollar sus actividades habituales, negándose a respetar las orientaciones de sus docentes, en especial de la Dirección del Establecimiento que dispuso el reinicio de las actividades escolares, y una clara falta de respeto y transgresión al derecho a estudiar de sus compañeros más de 3.500 en una época en que se acerca la finalización del año escolar y hace peligrar el cumplimiento de los planes y programas dentro de los plazos fijados por el Ministerio de Educación».
Finalizó señalando que «la Municipalidad de Providencia se hace un deber en instar a los padres y apoderados a asumir su rol irreemplazable en la normalización del año escolar de sus hijos y pupilos a fin de que puedan cumplir así sus obligaciones escolares».
Santiago de Chile, 17 de octubre de 2006.
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