El próximo 8 de noviembre comenzará a regir el Acuerdo Estratégico Traspacífico de Asociación Económica entre Chile, Nueva Zelanda, Singapur y Brunei Darussalam, gracias al cual gran parte de los productos nacionales que se exportan a dichos países podrá entrar libre de arancel.
La iniciativa tiene por objetivo crear una alianza económica y estratégica entre los países involucrados, basada en el interés común y en la profundización de la relación en todas las áreas de aplicación, principalmente comercial, económica, agrícola, educacional, científica y tecnológica.
El acuerdo establece que Singapur otorgó a Chile desgravación inmediata para todos los productos, lo que implica que todas las exportaciones chilenas a dicho mercado ingresarán libres de aranceles desde la entrada en vigencia del Acuerdo. Uno de los productos más favorecidos con esta concesión serán los licores.
Por su parte, el 96% de las exportaciones que actualmente se destinan a Nueva Zelanda, tendrá acceso libre de arancel desde su entrada en vigencia. Entre los productos con más potencialidades, dada su liberalización inmediata figuran las carnes de cerdo y de aves, erizos congelados y preparados, miel, avena mondada, aceite de pescado, moluscos preparados, jugos de manzana, harina de pescado, desodorantes, maderas aserradas, puertas de madera y artículos de grifería, entre otros.
En tanto, Brunei Darussalam concedió a Chile la desgravación del 69% de sus productos en categoría inmediata.
En términos de las importaciones a Chile, Nueva Zelanda y Singapur podrán ingresar libre de aranceles el 88% de sus productos.
Protección a sectores sensibles
Junto con esta apertura comercial, se consideraron períodos largos de desgravación arancelaria para los sectores productivos sensibles de Chile, donde están los textiles y calzados. Además con desgravación a 10 años se consideraron el trigo, la harina de trigo y el azúcar, productos incluidos en la banda de precios.
Los productos lácteos, con gran sensibilidad respecto de las importaciones provenientes de Nueva Zelandia, se desgravarán en 12 años, con un período de gracia de 6 años, con lo cual el sector quedará liberalizado completamente el año 2017.
El Ministro de Relaciones Exteriores, Alejandro Foxley, consideró que la materialización del acuerdo ayudará a cumplir otro de los énfasis de la Política Exterior del Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, en orden a mejorar la capacidad de la economía chilena para competir en los mercados globales y en particular en Asia Pacífico.
«Estamos llegando a un acuerdo de 2.500 millones de personas en Asia Pacífico, como consecuencia de estos TLC. Este es el mayor desafío que enfrentan nuestros empresarios en estos días. Desde el Gobierno ayudaremos en este proceso para que sea exitoso», sostuvo el Canciller Foxley.
Por su parte, el Director General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon), Carlos Furche, manifestó que «nuestra idea es que el P-4 sea un vínculo económico-comercial entre América Latina y e Asia Pacífico, y que en este contexto, Chile se convierta en una plataforma de negocios para toda la región».
Servicios, medioambiente y propiedad intelectual.
Siguiendo con la política comercial con que Chile ha negociado sus TLCs, se acordó un capítulo que tiende a la liberalización del comercio de servicios. El capítulo contiene una amplia cobertura sectorial y constituirá una herramienta de profundización de los vínculos comerciales en esta materia.
Respecto a Normas Técnicas se alcanzaron acuerdos para mantener un equilibrio en la protección que se les debe dar a los consumidores. Asimismo, en materia de cooperación se concretó un capítulo de colaboración estratégica bilateral y trilateral, lo que conforma la tónica de un tratado nuevo, que va más allá de lo estrictamente comercial y que permite avanzar hacia un Acuerdo de Asociación Económica Estratégica entre los cuatro países.
En el ámbito medioambiental, se reafirmó el interés por alcanzar altos niveles de protección y cumplir los compromisos ambientales originados en los tratados multilaterales, así como en planes de acción conducentes a alcanzar el desarrollo sostenible. En este sentido, se acordó como inapropiado el uso de políticas, leyes y regulaciones ambientales con fines proteccionistas y el rebajar los niveles de protección ambiental o dejar de hacer cumplir o administrar las leyes y regulaciones ambientales para promover el comercio y la inversión.
Con respecto a propiedad intelectual y entrada temporal, se concluyeron satisfactoriamente para Chile capítulos en los que se incluyó el reconocimiento de las indicaciones geográficas para vinos y licores en el territorio de las partes, en el primer caso y facilitar el ingreso y residencia del personal transferido entre empresas relacionadas, en el segundo. Adicionalmente, se acordó la inclusión a dos años del ingreso de prestadores de servicios profesionales y visitantes de negocios.
Santiago de Chile, 06 de noviembre de 2006.
Crónica Digital
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