Un claro ejemplo, dijo, es lo que ocurre con los pobladores de Mehuín, en la X Región.
El ex magistrado y Decano de la Facultad de Derecho de la U Central, quien es un férreo defensor de la causa indígena y fue recientemente designado werkén (vocero oficial) de la comunidad lafquenche del borde costero de Valdivia, llamó al diálogo entre CELCO y los pescadores artesanales de Mehuín. Es necesario que exista la voluntad, tanto por parte de los que ganan, como también de los organismos del Estado para que la fiscalización sea pura, correcta y eficiente, dijo Guzmán en el marco del Foro de los pueblos indígenas por la erradicación de la pobreza.
El escenario entre CELCO y los pescadores de Mehuín ha vuelto a estar marcado por una dura polémica. Al rechazo de la comunidad a la construcción de un ducto para que la planta Valdivia de Celulosa Arauco descargue sus residuos al mar, se sumó la decisión de la Comisión Regional del Medio Ambiente, Corema Los Lagos, de dar luz verde a una prórroga de dos años para que la empresa entregue un estudio de impacto ambiental de alternativa de descarga distinta al río Cruces.
Por su parte, Aucan Huilcaman, del Consejo de Todas las Tierras, quien también participó en el Foro sobre erradicación de la pobreza indígena en la escuela de Derecho de la Universidad Central, reiteró que mientras no se reconozca el derecho a la tierra, al territorio, mientras no se tenga acceso a los recursos, a la participación política y a la autodeterminación de los pueblos indígenas, sencillamente las estrategias públicas estarán lejos de superar la pobreza del pueblo indígena.
Huilcaman sostuvo que se debe iniciar un proceso real de reconocimiento de los derechos de los pueblos indígenas. Las políticas públicas han estado centradas como sujetos receptores, asistencialistas, más que convertir en sujeto a los pueblos originarios.
Santiago de Chile, 9 de enero 2007
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