Por primera vez en la historia de la justicia chilena, un juez de la república acusó a la extinta Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), de ser una asociación ilícita en el caso del asesinato del ex comandante en jefe del Ejército Carlos Prats y su esposa, Sofía Cuthbert, en Buenos Aires, ocurrido en septiembre de 1974.
Además, el magistrado Alejandro Solís acusó a la ex agente de la DINA Mariana Callejas como autora material del asesinato y al civil Jorge Iturriaga y el suboficial del Ejército (R) Reginaldo Valdés como cómplices.
Al conocer los fundamentos de la resolución judicial el abogado Jorge Balmaceda, defensor de los hermanos Iturriaga y del brigadier Pedro Espinoza, rechazó la calificación del ministro Solís de la existencia de una asociación para cometer delitos al interior del Ejército.
Tras la notificación de los inculpados el ministro de fuero esta en condiciones de dictar las condenas en contra de la cúpula de la DINA y del Departamento exterior del organismo represivo, que fuera creado por la Junta Militar golpista en el año 73 y cuya dependencia, por declaraciones del mismo general en retiro Manuel Contreras, respondía directamente al dictador Augusto Pinochet.
Tras la dictación de condena, sucederá la etapa probatoria y la confirmación de las penas por lo que se espera que dicho proceso podría finalizar durante el primer semestre de este año.
Santiago de Chile, 25 de enero de 2007.
Crónica Digital
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