Si todos los hombres se sometieran a esa intervención en un plazo de 10 años, se evitarían dos millones de nuevas infecciones y 300 mil muertes, indicaron especialistas.
De acuerdo con los resultados divulgados en la revista estadounidense Public Library of Science Medicine, las células que se encuentran en el prepucio aumentan la vulnerabilidad de los hombres al SIDA.
El VIH puede sobrevivir más tiempo en la humedad y el calor que rodea a esa zona del pene, añadieron los investigadores.
El equipo dirigido por Bertrand Auvert, de la Agencia Nacional Francesa de Investigación (INSERM) y colegas de la OMS se apoyó en la comparación de la incidencia de SIDA entre la población circuncidada africana y la que no presenta esa condición.
«En el oeste de Africa, la circuncisión masculina es común, y la prevalencia del VIH es baja, mientras que en el sur de Africa es al revés», indicaron en el texto.
Los investigadores estudiaron los efectos que tendría la pérdida del prepucio generalizada en la población de Africa, continente afectado por la pandemia del SIDA.
De acuerdo con la pesquisa, la incidencia de la enfermedad en Africa es más baja en el oeste, mientras que en el sur, donde no se acostumbra realizar esa operación, resulta elevada.
«Este análisis muestra que la circuncisión masculina podría evitar casi seis millones de infecciones nuevas y salvar tres millones de vidas en el Africa subsahariana en los próximos 20 años», añadieron los especialistas.
Aclararon, sin embargo, que esa operación no puede controlar la propagación del virus por si sola, puesto que los hombres circuncidados, aunque con menos probabilidades, también son vulnerables al contagio.
Washington, 17 de julio 2006
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