La firma del documento, que ya había sido afinado por ambos en diciembre pasado durante una visita de Lagos a México, tuvo lugar en la residencia presidencial de Cerro Castillo, en la ciudad balneario de Viña del Mar, a unos 120 kilómetros de Santiago.
En una conferencia de prensa conjunta en la víspera, luego de una reunión privada de trabajo, ambos gobernantes destacaron la importancia del acuerdo, que tiende a reforzar los nexos comerciales, de colaboración y de coordinación política en momento clave para América Latina.
Lagos calificó de «histórica» la asociación estratégica acordada y «un ejemplo de integración de dos países, de dos economías para poner en marcha un aporte al desarrollo de la agenda latinoamericana en la región».
Declaró que hace 15 años no había nada, sólo relaciones diplomáticas, y «este gran salto» ha creado las condiciones «para una cooperación internacional para el desarrollo tanto a nivel de nuestros países como con terceros».
Por su parte, Fox destacó las coincidencias de ambos gobiernos, tanto en su proyección económica como en sus miradas hacia el mundo exterior, especialmente en lo que toca a las relaciones que deben primar en el continente.
«México y Chile comparten la misma visión democrática, la convicción de que justicia y economía con rostro humano son indispensables para garantizar el bienestar de nuestras gentes», resaltó el gobernante.
Con fuertes vínculos ambos con Estados Unidos, los dos gobernantes son partidarios de hacer avanzar las negociaciones hacia el moribundo Acuerdo de Libre Comercio (ALCA) que impulsa Washington, aunque señalaron que la asociación estratégica suscrita va más allá.
Lagos destacó la necesidad de hacer un ALCA por etapas, con «un mínimo común para todos», una opinión muy similar a la planteada por su homólogo mexicano.
«Tendrá que ser flexible y adaptarse a las realidades, pues no se trata de tomar ventaja de nadie, sino de que cada país pueda beneficiarse de ese acuerdo», apuntó.
En un encuentro previo con más de 300 empresario chilenos, Fox había destacado los logros conseguidos en el TLC, pero admitió que se requieren mayores inversiones y «una mayor igualdad en los ingresos».
«A pesar de los logros, nos queda un largo camino sobre todo en materia de inversiones y especialmente en la distribución de los ingresos,» precisó Fox, a sus interlocutores, entre ellos, el ministro chileno de Economía, Jorge Rodríguez.
Señaló que no podrá haber una sociedad democrática sin una economía humanista, «tal como estamos buscando ambas naciones».
«Nunca podremos tener una sociedad democrática, una sociedad fuerte, si no es a través de esta tarea de distribuir mejor el ingreso, de formar capital humano, asegurar oportunidades a cada ciudadano y a cada familia,» agregó.
Fox arribó a Chile la tarde del miércoles para realizar una visita oficial de dos días, la última que recibe el saliente presidente Lagos antes de dejar el poder el próximo 11 de marzo.
Chile y México mantienen un fuerte intercambio comercial que, de enero a septiembre del pasado año, sobrepasó la cifra de mil 500 millones de dólares (mil 150 millones de exportaciones chilenas y 531 mexicanas).
Santiago de Chile, 27 de enero 2006
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